Transcripción:
El gobierno de México a través de la Coordinación Nacional de Protección Civil, dependiente de la Secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), publicó ayer la Declaratoria de Desastre Natural 47 municipios de Guerrero, como consecuencia de la lluvia severa y vientos fuertes que trajo consigo el huracán Otis en categoría 5, entre el 24 y 25 de octubre pasado.
Con la declaratoria de desastre natural se liberan recursos del gobierno federal para atender a la población damnificada.
Se trata de los municipios: Acapulco de Juárez, Ayutla de los Libres, Azoyú, Copala, Cuajinicuilapa, Cuautepec, Florencio Villarreal, Igualapa, Juchitán, Marquelia, Ometepec, San Luis Acatlán, San Marcos, Tecoanapa y Tlacoachistlahuaca.
De igual modo, Xochistlahuaca, Coahuayutla de José María Izazaga, Petatlán, Atlamajalcingo del Monte, Malinaltepec, Xalpatláhuac, Atoyac de Álvarez, Benito Juárez, Coyuca de Benítez, Tecpan de Galeana, Ajuchitlán del Progreso y La Unión de Isidoro Montes de Oca.
Así como Zihuatanejo de Azueta, Zirándaro, Coyuca de Catalán, San Miguel Totolapan, General Heliodoro Castillo, Leonardo Bravo, Chilpancingo de los Bravo, Juan R. Escudero, Iliatenco, Cochoapa el Grande, Metlatónoc, Acatepec, Quechultenango, Mochitlán, Tlacoapa, Cutzamala de Pinzón y Tlalchapa.
Además, Pungarabato, Tlapehuala, Arcelia, Apaxtla, Cuetzala del Progreso, Cocula, Eduardo Neri, Tixtla de Guerrero y Chilapa de Álvarez.
La declaratoria la solicitó el 27 de octubre Evelyn Salgado Pineda en su carácter de gobernadora de Guerrero.
Se declara como zona de desastre por la ocurrencia de lluvia severa y vientos fuertes el día 24 de octubre de 2023", señala el oficio.
La Declaratoria de Desastre Natural se expidió como protocolo para efectos de atender los daños desencadenados por fenómenos naturales perturbadores, de acuerdo con lo dispuesto por la Ley General de Protección Civil.
El miércoles el gobierno federal anunció la puesta en marcha de un plan para la reconstrucción de Guerrero, pero especialistas lo consideran insuficiente.
A pesar de que "hay voluntad", el Plan General de Reconstrucción y Apoyo a la Población afectada por el huracán Otis, que contempla una inversión de 61 mil 313 millones de pesos, "se queda corto" ante los destrozos generados por el huracán, señaló José Yuste, analista en temas económicos y financieros.
En esta ocasión hay voluntad del gobierno para tratar de hacer un plan de recuperación, y parecería cosa menor, pero hay que recordar que durante la pandemia de covid no hubo ninguna voluntad con el sector turístico, ni las aerolíneas, ni con los hoteleros o restaurantes. En este caso fue notorio; sin embargo, es un plan que se queda corto con apoyos hasta febrero", dijo en entrevista con Pascal Beltrán del Río, para Imagen Radio.
El también columnista de Excélsior insistió en que "es un programa muy reducido para lo que se requiere", ya que otorgarles créditos para hacer una pequeña empresa, no tienen sentido si no hay turistas a quienes ofrecerles un servicio.
Destrucción causada por el huracán Otis debe cambiar a la industria de la construcción y tomar ejemplo de nuevos diseños y medidas de seguridad, que impidan que un fenómeno con esa intensidad se vuelva letal, advirtió el líder de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) en Guerrero, Carlos Sevilla Rodríguez.
Hay un caso muy interesante del edificio del Infonavit que acaban de construir, en el bulevar De las Naciones que no sufrió ningún daño y es impresionante porque también tiene vidrios y todo, pero en la forma en la que fue diseñado que hubo muros antes de los cristales, permitió que no se rompieran ninguno de ellos", comentó.
Consideró que el reglamento de construcción del ayuntamiento de Acapulco debe impedir que se usen materiales desprendibles en los edificios y debe incorporar un área de refugio para sus huéspedes.
El dirigente empresarial descartó que haya daños estructurales en los edificios de Acapulco, la mayoría de ellos dedicados a los servicios turísticos y condominios.
-Pedro Tonantzin
"NO SE DEJARÁ DESAMPARADO A NADIE"
La coordinadora de los comités de Defensa de la Transformación, Claudia Sheinbaum, aseguró que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador no dejará desamparado a nadie ante los daños que ocasionó el huracán Otis en Guerrero.
La virtual candidata de Morena por la Presidencia de la República destacó el plan de reconstrucción de Acapulco y Coyuca de Benítez que alcanza los 61 mil 313 millones de pesos de inversión.
Frente a la campaña de mentiras y odio de la oposición, hay un gobierno humanista, que dice la verdad y no dejará desamparado a nadie", aseguró.
-Ximena Mejía
DESTACA BENEFICIOS
Sheinbaum enlistó algunos puntos de la ayuda que se brindará a los afectados:
Seis meses de prórroga en el pago de Infonavit, Fovissste y del Seguro Social.
No se pagará el servicio de energía eléctrica de noviembre de 2023 a febrero de 2024.
Se entregará una canasta básica semanal de 24 productos alimenticios para 250 mil familias damnificadas durante tres meses.
Aumentará al doble el número de becas para estudiantes de nivel básico.
Tras la devastación que el huracán Otis causó en la costa de Guerrero, el gobierno federal anunció un paquete de ayuda de 60 mil millones de pesos que se empleará para la reconstrucción del puerto de Acapulco y comunidades aledañas, la cual podría demorar cinco años, advierte especialista.
El presidente Andrés Manuel López Obrador declaró que para la póxima Navidad espera que el puerto se haya restablecido y las familias puedan recuperarse de la tragedia.
Al respecto, el presidente nacional de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Francisco Solares Alemán, afirmó que "la reconstrucción como tal, yo creo que será en, por lo menos, cinco años (...) y de la reactivación económica se ha hablado de alrededor de dos años".
En entrevista con Pascal Beltrán del Río, para la Primera Emisión de Imagen Radio, el ingeniero Solares indicó que no cree "posible que pueda ser antes", puesto que "la economía de Acapulco, fundamentalmente, depende del turismo", y no de manera de que los visitantes regresen pronto. Tras visitar el puerto, afirmó que "el 100% de las edificaciones de Acapulco sufrieron daños en mayor o menor grado", razón por la cual argumenta que "debería de considerarse el no reconstruir realmente a Acapulco, sino construir un nuevo a Acapulco de fuera".
Consideró que "la recuperación del puerto dependerá de la velocidad en que se puedan ofrecer ya servicios de turismo".
Si bien, destacó que se ha realizado un trabajo excepcional en el restablecimiento de la energía eléctrica por parte de la Comisión Federal de Electricidad, y se han logrado avances en el desazolve de las vialidades y parte del sistema de alcantarillado, en su opinión tendría que brindarse atención prioritaria no sólo a la zona turística, sino a "las viviendas que están en los terrenos que son de alto riesgo" y mejorar las condiciones de los habitantes de Acapulco.
Por otra parte, descartó que haya afectaciones graves a las construcciones formales, aquellas que se "hicieron de acuerdo con los reglamentos de construcción para Acapulco", con base en la normativa de construcción para terrenos sísmicos, que es más estricta que la referente a huracanes.
El problema, puntualizó, "son todas las fachadas, todos los acabados, los cristales (...) son los que volaron y los que no soportaron estos vientos de casi más de 100 kilómetros sostenidos".
A este problema, dijo, se añade otro: el presupuesto. Pese a que aún no hay una cifra oficial que indique cuánto costarán las reparaciones en Acapulco, sí hizo referencia de la dimensión que éstas podrían adquirir: "alguien estimó la más alta en 15 mil millones de dólares (...) con base en daños en otras ciudades, con condiciones de otros huracanes", sin embargo, "no te podría decir si el número es correcto", aclaró.
Una parte de la pérdida se dio por la fuerza del fenómeno meteorológico, pero la otra por el "saqueo que vino a rematar la tragedia", aseveró Alejandro Martínez Sidney, presidente de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios Turísticos.
Sesenta y tres mil negocios establecidos en el Puerto de Acapulco de todos los giros, de todos los segmentos económicos, se perdieron por el embate del huracán Otis, comentó en en entrevista para la Primera Emisión de Imagen Radio.
Al día de hoy todavía no hay establecimientos mercantiles operando al ciento por ciento que puedan brindarle un curita o una aspirina a la ciudadanía, a ese grado el desabasto tenemos", indicó.
Son hoteles, restaurantes, bares, discotecas, servicios turísticos", detalló.
Hubo una rapiña que "tiene una justificación y hay otra rapiña voraz, criminal", acusó, porque "fueron sobre las cajas fuertes de los establecimientos, se llevaban los cajeros de los bancos, intentaron entrar a bóvedas de los bancos, acabaron con todo", lamentó.
cva