¿Más libres o más controlados?


Resumen:

Permiten la comunicación en tiempo real, sin importar fronteras, pero también propagan noticias falsas y discursos de odio.

Transcripción:

FIND: REDES SOCIALES

¿MÁS LIBRES o MÁS CONTROLADOS?

Permiten la comunicación en tiempo real, sin importar fronteras, pero también propagan noticias falsas y discursos de odio.

REDES SOCIALES: INMEDIATEZ o FALSEDAD. Entre los beneficios más destacados está la facilidad para comunicarse en tiempo real, sin importar fronteras. Sin embargo, la propagación de noticias falsas, la manipulación de narrativas y los discursos de odio dominan también las diversas plataformas.

SEMANA 29 DE JUNIO DE 2025

LAS REDES SOCIALES,

¿NOS HACEN MÁS LIBRES O MÁS CONTROLADOS?

KEVIN ARAGÓN

Jenny Teresita Guerra, investigadora del Instituto de Investigaciones Bibliotecológicas de la Universidad Nacional Autónoma de México, comparte un análisis sobre la capacidad, manipulación e influencia de las redes al transmitir información.

TikTok, Facebook, X (antes Twitter), Tinder, LinkedIn, WhatsApp, Threads, Telegram, Snapchat, YouTube... Hoy las redes sociales se han convertido en el principal medio de comunicación e información del planeta, con más de cinco mil millones de usuarios.

Entre sus beneficios más celebrados están la posibilidad de comunicarse en tiempo real desde prácticamente cualquier parte del mundo, la aparente apertura de canales de opinión y la capacidad de formar comunidades en torno a intereses o ideologías compartidas. Sueños que ya estaban presentes en los orígenes de las redes sociales a finales del siglo pasado.

A inicios de 2025, Mark Zuckerberg, fundador de Facebook y director del conglomerado Meta, retomó precisamente ese discurso fundacional al anunciar un cambio en las políticas de su empresa hacia una postura más permisiva en materia de libertad de expresión.

Su objetivo, aseguró en el popular podcast "The Joe Rogan Experience", era "volver a las raíces", "darle voz a la gente" y "hacer del mundo un lugar más abierto y conectado".

Pero cabe preguntarse: ¿realmente las redes sociales han cumplido esas promesas? Para la doctora Jenny Teresita Guerra, investigadora del Instituto de Investigaciones Bibliotecológicas y de la Información de la UNAM, la respuesta no es positiva, dice en entrevista con El Sol de México.

META, ¿EL MONOPOLIO DE LAS REDES SOCIALES? Para entender a fondo esto, la especialista apunta que hay que comprender en qué etapa del desarrollo de las redes sociales nos encontramos. En un inicio, en la década de 1990, las redes comenzaron en ambientes universitarios de Estados Unidos y luego saltaron a públicos más amplios con el uso masivo de la web.

Así surgieron redes como Hi5, Metroflog o MySpace, conservando un carácter amateur. Pero luego iniciativas como Facebook y Twitter abrieron una fase más compleja y global, que implicó mayor profesionalización y un cambio de perfil empresarial.

"Hoy yo me atrevería a decir que estamos ante una tercera etapa: la de las plataformas, en la que las redes ya no se pueden ver de forma individual, son grupales. Se han construido a partir de redes que adquieren a otras, como lo hacían los medios tradicionales que se volvían monopolios comprando a competidores para ampliar su dinámica de servicios", explica Guerra.

"Ahora las redes están básicamente interconectadas. Si tienes un perfil, este estará ligado a otra red social. El entorno se ha vuelto mucho más complejo, tanto que se han vuelto mecanismos de identificación y tienen el poder de ser llaves para acceder a otros servicios que no necesariamente se limitan a lo que te ofrecen las redes sociales", agrega.

En abril de este año, Meta fue demandada por la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos (FTC, por sus siglas en inglés) por prácticas monopólicas, pidiéndole que ponga en venta Instagram y WhatsApp, las cuales compró en 2012 y 2014. La comisión presentó como pruebas correos de Zuckerberg diciendo que las consideraba una amenaza.

LAS REDES SOCIALES INFORMAN, PERO PUEDEN MANIPULAR LA PERCEPCIÓN DE LA SOCIEDAD. Contrario a la imagen "idónea" que se suele tener de las redes sociales, asegura la entrevistada, estos "no son los espacios pulcros ni neutros", ya que tienen la capacidad de transmitir información de forma dirigida y con gran influencia.

"A los propietarios de las redes sociales se les suele ver como jóvenes empresarios, triunfadores, virtuosos y libertarios. Pero en realidad, su agenda es contradictoria y preocupante; se ha podido ver que buscan instaurarse como un nuevo poder, demeritando el rol de los gobiernos y argumentando que habría que ser más plurales y democráticos, pero esto es sólo a favor de sus propios intereses.

Esto resulta aún más preocupante, porque la forma en que operan las redes sociales en el control de la información responde a la misma información que proporcionan los usuarios de sí mismos, desde biometría hasta gustos y preferencias.

"Lo que hacen las redes sociales es explotar a las personas como generadoras de contenido y como fuentes de datos sin que haya un beneficio directo.

Se piensa que es estar informado, pero es una información con sesgos, está condicionada. Difícilmente una persona que está de acuerdo con una forma de pensar o una ideología va a recibir otro tipo de mensajes, por lo que se generan 'burbujas de información' que refuerzan la visión del mundo de las personas, sean correctas o no.

"Esto no es democrático ni plural de modo alguno", dice la Dra. Guerra, quien menciona que ha habido casos en los que las redes sociales claramente venden esta información al mejor postor.

Tal y como sucedió en 2019, año en que la FTC acusó a Facebook de vender información a la empresa Cambridge Analytica durante la campaña electoral que derivó en el primer mandato de Donald Trump en la presidencia de Estados Unidos. "La interacción inmediata y la capacidad de que los usuarios pudiéramos no sólo consumir contenidos, sino producirlos habían hecho que todo pareciera muy democrático. Pero con los años y con la privatización y comercialización de la red, cooptada por los gigantes tecnológicos, ha cambiado", dice Jenny Teresita Guerra.

Tienen el poder de configurar los algoritmos de todas sus plataformas para enviar mensajes orientados a personas específicas y con ello crear esferas públicas que los beneficien.