Resumen:
Bajo las calles de Matamoros, Tamaulipas, corre una red de gas e irregularidades atribuidas a la empresa Tamaulipas, que quedaron exhibidas tras una explosión en junio de 2023 que causó a Thalía quemaduras en 90 por ciento del cuerpo.
Este caso, viralizado en redes sociales la semana pasada, no fue el primero que involucró a la compañía de la francesa Engie. Desde 2022, la Agencia Nacional de Seguridad Industrial de Protección al Medio Ambiente del Sector Hidrocarburos (ASEA) tiene en la mira a la firma por otra explosión ocurrida en enero de ese año, donde dos personas murieron.
Transcripción:
Bajo las calles de Matamoros, Tamaulipas, corre una red de gas e irregularidades atribuidas a la empresa Tamaulipas, que quedaron exhibidas tras una explosión en junio de 2023 que causó a Thalía quemaduras en 90 por ciento del cuerpo.
Este caso, viralizado en redes sociales la semana pasada, no fue el primero que involucró a la compañía de la francesa Engie. Desde 2022, la Agencia Nacional de Seguridad Industrial de Protección al Medio Ambiente del Sector Hidrocarburos (ASEA) tiene en la mira a la firma por otra explosión ocurrida en enero de ese año, donde dos personas murieron.
Autoridades municipales dijeron a MILENIO que en los 15 días posteriores a ese siniestro se reportaron 346 fugas de gas desde entonces, por lo menos se denuncian dos al mes en sus tuberías. Según una tarjeta informativa de la ASEA, inspectores detectaron que compañía: no contaba con seguro vigente de Responsabilidad Civil ni de Responsabilidad por Daño Ambiental, por que fue multada.
La regidora Alma Rosa Alarcón Serna, de la comisión de energía de Matamoros, sostiene que la empresa no se hace responsable de los daños causados a las víctimas. "Acaba de adquirir el seguro de daños a terceros y ha hecho responsables por la multa impuesta, pues se ha estado amparando y amparando.. lo más grave es que los jueces le conceden los amparos".
Documentos oficiales refieren que esa explosión, a menos de 10 minutos del departamento de Thalía, fue por "acumulación de gas en una tienda de conveniencia por fuga no detectada". Sin embargo, ese negocio no contaba con el servicio de gas. Ese día murieron dos personas, el trabajador; y un usuario.
Año medio después, el jueves 29 de junio de 2023, se registró otra explosión por acumulación de gas en la vivienda de Thalía, aunque tampoco contaba con el servicio, pues toda su instalación era eléctrica. Hoy, a ella no puede darle el sol en la piel y debe estar en una habitación con clima controlado debido a las quemaduras.
En la calle Ricardo Salazar Ceballos siguen los restos de la explosión bloqueando el paso vehicular; escombros, piedras, tablas y un vehículo afectado esa madrugada recuerdan a los vecinos los momentos en que acudieron paramédicos, bomberos, policías y hasta militares.
"Nos imaginamos de todo menos una explosión", dice Félix Abelardo, vecino de la casa contigua. Y comparte que antes del incidente él y su padre colocaron un portón y cuando lo soldaban "se soltó una llamarada", aparentemente por una fuga. "Lo reportamos, pero nadie vino de cir qué onda, hasta que pasó esto desgraciadamente".
Otro elemento ya integrado a las carpetas de investigación, explica la regidora Alarcón Serna, son las irregularidades en el peritaje elaborado por Tamaulipas tras la explosión en el departamento de Thalía. "El primer peritaje se realiza con un explosímetro propiedad de la empresa y no detecta nada. Cuando se hace una segunda revisión con un explosímetro ajeno, resulta que el componente de explosividad es bastante elevado", acusa.
Salvador Martínez, periodista conocido en redes sociales como Wikichava y hermano de Thalía, ha levantado la voz por ella y otras dos víctimas de la red de gas. Ha bloqueado calles, tocado puertas, interpuesto solicitudes de información, hablado con peritos, con gente cercana al caso, después de un año y ante la nula acción gubernamental, decidió hacer pública la historia.
"Si esto fuera una película, la sinopsis diría: 'Mujer sobrevive a explosión de gas y hermano periodista encuentra un entramado de irregularidades"), así describe el momento que pasan él y su familia. Luego de que el caso se hizo viral, el gobierno federal, la Secretaría de Medio Ambiente y la ASEA voltearon a ver su caso.
Se comprometieron a investigar a fondo las irregularidades, mientras que la empresa francesa, que en principio había desconocido el incidente, ahora asegura que colaborará a las investigaciones y ya busca una reunión con autoridades municipales y las víctimas; de acuerdo con Salvador, "ya dijeron que en caso de resultar responsables, ellos asumirían".
Tamaulipas, propiedad de la francesa, ya está en la mira de las autoridades mexicanas
Vivienda de Thalía tras el siniestro de 2023 propiciado por la compañía.