Resumen:
De izquierda a derecha: Luis Téllez, ex secretario de Energía y ex presidente de la Bolsa Mexicana de Valores; Alejandro Malagón, presidente de Concamin; Altagracia Gómez, coordinadora del Consejo Asesor para el Desarrollo Económico Regional y Relocalización; el embajador de Estados Unidos, Ronald D. Jonhson; Francisco Cervantes, presidente del CCE; Juan José Sierra Álvarez, presidente de Coparmex, y Jorge Esteve Recolons, presidente del Consejo Nacional Agropecuario. Foto CCE
Transcripción:
De izquierda a derecha: Luis Téllez, ex secretario de Energía y ex presidente de la Bolsa Mexicana de Valores; Alejandro Malagón, presidente de Concamin; Altagracia Gómez, coordinadora del Consejo Asesor para el Desarrollo Económico Regional y Relocalización; el embajador de Estados Unidos, Ronald D. Jonhson; Francisco Cervantes, presidente del CCE; Juan José Sierra Álvarez, presidente de Coparmex, y Jorge Esteve Recolons, presidente del Consejo Nacional Agropecuario. Foto CCE
Ciudad de México. A pocas horas de que se dio a conocer que el presidente estadunidense Donald Trump firmó una orden ejecutiva para utilizar fuerza militar contra cárteles de la droga, Ronald D. Johnson, embajador de Estados Unidos, se comprometió en un encuentro con empresarios a trabajar sobre las preocupaciones comerciales que existen con el mayor socio comercial de México.
Al concluir la sesión del Consejo Nacional del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), en la que participó el representante diplomático de la Unión Americana, Francisco Cervantes Díaz, líder del organismo cúpula, comentó en entrevista que en el encuentro no se abordó el tema de seguridad entre ambas naciones.
No obstante, consideró que de ser cierta la medida firmada por Trump, sería una exageración. Además, resaltó la relación cordial entre la presidenta Claudia Sheinbaum y Trump. "Cuando se pone tensas las cosas entra la llamada de la presidenta con el presidente Trump, porque ya han sido varias llamadas y siempre se logran cosas", dijo.
"En un momento clave para la relación comercial entre nuestras naciones, el diálogo franco y constructivo es la mejor vía para encontrar soluciones que fortalezcan la competitividad, el crecimiento y la prosperidad compartida", señaló el CCE a través de un mensaje publicado en X.
Cervantes Díaz subrayó que se trató de una reunión "muy cordial" con Johnson. "Hablamos de las oportunidades, estuvieron los sectores, estuvo el acero, estuvo el aluminio, estuvo la parte de automotriz", dijo.
Al encuentro, también acudió Altagracia Gómez Sierra, coordinadora del Consejo Asesor para el Desarrollo Económico Regional y Relocalización (CADERR), quien, de acuerdo con el líder del CCE, resaltó la importancia del país para el comercio bilateral.
Cervantes Díaz adelantó que, si bien Johnson apoyará al sector privado para exponer sus preocupaciones ante Trump, una delegación de representantes de sectores afectados y el gobierno mexicano, están preparando una visita en octubre a Washington para dialogar con congresistas y otros actores de la Unión Americana.
Luis Méndez Jaled, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), señaló en entrevista que existe "buen ambiente", por lo que se espera que concluyan estos plazos para quitar la incertidumbre que se ha generado por la aplicación de aranceles.
Apuntó que los representantes de todos los organismos afiliados al CCE expresaron "de manera general y en un muy cálido encuentro" las incertidumbres generadas, por lo que Johnson respondió con su disponibilidad para hacer una buena conexión entre ambas naciones.
Por separado, Alejandro Malagón Barragán, presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), comentó que el diplomático estadunidense "está abierto a entender a los sectores, a entender lo que pueda hacer desde su cancha, ir al campo, trabajar sobre los temas del campo, con la manufactura, con la industria y ponerse a trabajar, a sumar".
Aunque comentó que México está en una mejor situación en cuanto a aranceles, es preciso trabajar en los que se aplican al cobre, acero y aluminio. "Hay que trabajar mucho y principalmente el cobre en lo que son los cables. En extracción no hay problema, en metal no hay problema, pero en el concentrado sí, porque el concentrado es el que se convierte para hacer los cables y todo se fabrica en México, aunque algunos de los concentrados que vienen son producidos en Estados Unidos", dijo.